Mensaje ejecutivo

Saludos a eso

Un brindis por la fraternidad y el compañerismo.

Gran Maestro, Arte 2020 Final_twitter

La tradición masónica nos dice que nuestros antiguos hermanos recibían entre sus salarios vino para disfrutar durante las horas de refrigerio. Además de ser una de las pocas bebidas seguras y potables disponibles en ese momento, el vino, por supuesto, traía consigo una sensación de felicidad y bienestar. Su consumo por parte de los masones en eventos sociales, con moderación, promovía la buena voluntad y la camaradería.

En los siglos XVII y XVIII, las logias masónicas a menudo se reunían en habitaciones encima de tabernas. Los miembros se retiraban abajo después de sus labores para refrescarse con comida y bebida. A partir de ahí, se desarrollaron muchas de las primeras "cabañas de mesa" y juntas festivas, con masones ofreciendo brindis a varias personas, lugares, ocasiones e ideas. Fue precisamente en ese tipo de ambiente agradable que cuatro tabernas logias en 1717 en Londres crearon la primera Gran Logia.

Los masones han llegado a comprender la lugar especial que bebe mantener en nuestras interacciones fraternas. Hemos evolucionado nuestra normativa para evitar la intemperancia y el exceso. Advertimos a nuestros mayordomos y guardianes en su instalación para que mantengan la propiedad de la logia durante las horas de refrigerio. En los tiempos modernos, compartir una bebida en las cenas de los albergues, recepciones, juntas festivas y en los albergues de mesa puede mejorar nuestra conciencia sensorial y profundizar los lazos de verdadera amistad entre hermanos. Incluso durante la pandemia, nuestra Brindis del sábado por la noche en Facebook han reunido a un gran número de hermanos de todo el mundo para compartir un momento y levantar una copa.

Como masones, se nos enseña la importancia del refrigerio y el reposo para mantener una vida productiva y útil. La bebida, disfrutada con prudencia, puede aumentar esos beneficios. El Gran Arquitecto nos ha proporcionado un medio. Debemos seguir nuestros principios masónicos para mantenernos dentro de los límites debidos mientras disfrutamos los frutos de su generosidad.

Ya sea un whisky o un cabernet, o simplemente una cerveza de raíz, ¡disfrute de su vaso favorito con esta edición especial! ¡Viva! ¡Viva! ¡Viva!

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